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Muy buenos días, amigas y amigos de los medios de comunicación.

Estimados representantes de asociaciones de padres de  familia.

Estimados representantes de organizaciones sociales y empresariales.

Estimados profesores; alumnos.

Estimados Secretarios.

Distinguidos invitados especiales.

Bienvenidos a Los Pinos, a la casa de todos los mexicanos.

Los he convocado para hacer un importante anuncio en materia educativa.

En mi Gobierno estamos convencidos de que la educación es la llave del futuro del país, que el porvenir de cada Nación depende de la cobertura y de la calidad educativa que sea capaz de proveer a su población.

En esta era de la información y del conocimiento, sé que triunfarán las naciones que puedan dotar a sus niños y a sus jóvenes con las mejores capacidades para competir y ganar, ya que la educación contribuye a la formación de buenos ciudadanos, promueve la igualdad de oportunidades y brinda a nuestros niños y jóvenes las herramientas para abrirse paso en la vida.

Con educación se incrementa la productividad de los individuos y de la economía, y el país en su conjunto se beneficia, al contar con una fuerza de trabajo más educada.

Por eso, para el Gobierno Federal la educación es un asunto estratégico y, a la vez, un asunto de todos. Autoridades de los tres órdenes de Gobierno, profesores, alumnos, padres de familia y organizaciones sociales, debemos trabajar juntos para abrir las puertas de la educación a niños y jóvenes,  y garantizar su permanencia en el sistema educativo.

Hoy, muchas familias de todos los sectores de la sociedad, de todas las regiones del país, por otra parte, realizan un enorme esfuerzo económico para darle educación a sus hijos, para cubrir las colegiaturas correspondientes y con ello destinar una parte considerable del ingreso de la familia al pago de las escuelas.

Por esa razón, con base en la facultad que le concede la Constitución en el Artículo 89 al Presidente de la República, el día de hoy firmaré un Decreto para que las personas físicas puedan deducir el pago de las colegiaturas de preescolar, de primaria, secundaria y educación media superior de su correspondiente Impuesto Sobre la Renta.

Se trata de una medida largamente esperada por miles y miles de familias en todo el país, que se esfuerzan todos los días en sacar adelante a los suyos y en cubrir su educación con enormes esfuerzos.

Esta deducción será efectiva cuando los pagos se realicen a instituciones educativas privadas que cuenten con autorización o reconocimiento de validez oficial de estudios en términos de la Ley General de Educación.  Y aplicará cuando se trate de las colegiaturas para los estudios del propio contribuyente, de su cónyuge, de sus hijos o de sus padres.

Estamos decididos a apoyar a las familias en su esfuerzo por brindarle educación a sus hijos. Por eso estamos haciendo deducible el pago de las colegiaturas, que era una demanda largamente exigida por un importante sector de la población nacional.

La deducción que se propone tendrá como límite un monto equivalente al costo promedio por alumno del sistema educativo público a nivel nacional en cada uno de sus niveles.

Así, se atiende un principio elemental de justicia distributiva, ya que los alumnos que asisten a escuelas privadas no representan un costo para el Estado en materia de educación, aún cuando sus familias siguen contribuyendo a financiar el gasto de la educación pública a través del pago de sus impuestos.

Por otra parte, cabe insistir en que la medida cubre los niveles de preescolar a media superior. En cuanto a la educación superior, en fecha próxima, anunciaré también un programa de crédito escolar que fortalecerá los actuales esquemas de financiamiento y de becas para estudiantes de ese nivel educativo.

En suma, vamos a apoyar la educación de nuestros niños y jóvenes desde preescolar hasta el bachillerato, y vamos a apoyar la economía de las familias mexicanas haciendo deducible el pago de las colegiaturas, y a quienes están en educación superior y postgrado impulsaremos sus estudios con créditos educativos que sean accesibles, tal y como ocurre en una gran parte de países del mundo.

Quiero subrayar que el costo fiscal de la medida que hoy se anuncia se cubrirá con ahorros que genera la Administración Pública Federal, y de ninguna manera afectará los programas que estamos impulsando para elevar la cobertura y la calidad de la educación pública.

De hecho, el presupuesto para el sector educativo ha venido creciendo de manera constante en estos cuatro años. Pasó de 377 mil millones de pesos en 2006, a más de 531 mil millones de pesos este año; es decir, un incremento de más del 40 por ciento para la educación pública.

La escuela pública seguirá siendo financiada con todo énfasis por el Gobierno Federal, como lo hemos hecho todo el tiempo. En este periodo hemos construido 811 nuevas preparatorias y hemos rehabilitado 38 mil escuelas básicas. Más aún. Hemos mejorado en la calidad, mediante la institucionalización de las evaluaciones generales y el reclutamiento de profesores a través de concursos de oposición, gracias a la Alianza por la Calidad Educativa.

Además, el número de becas para alumnos de todos los niveles educativos se incrementó, pasando de seis a siete millones en el presente Ciclo Escolar. Todo esto hace patente el compromiso del Gobierno Federal con la formación de nuestros niños y jóvenes.

La medida que hoy anunciamos va a beneficiar a más de tres millones de niños y jóvenes, y contribuirá a que puedan continuar con su proyecto educativo, al tiempo que permitirá a las familias contar con recursos adicionales para realizar otros gastos indispensables para el bienestar del hogar.
Así, por una parte, contribuimos a mejorar la calidad de vida de las familias; por otro lado, liberamos recursos para que esas familias puedan disponer de mayor ingreso para enfrentar las necesidades de cada día.
Esto tendrá un impacto muy positivo, además, en nuestro mercado interno e incidirá directamente en la  competitividad y en el dinamismo de nuestra economía.

La medida tiene, además, importantes beneficios en el largo plazo, ya que la inversión en la educación es el proyecto más rentable que cualquier persona, familia o país puede emprender.

El incremento en las percepciones económicas futuras, derivadas de la educación, pagará con creces la inversión que se haga hoy en ella y, a su vez, estas mayores percepciones significarán a futuro una expansión de la recaudación estatal, lo que retribuye sobradamente el esfuerzo que hoy representa.

Es importante destacar que el impacto recaudatorio, además, de esta medida, no afecta las estimaciones de ingreso del presente Ejercicio Fiscal, ya que su aplicación se llevará a cabo en el momento de presentar la Declaración Anual correspondiente al 2011.

En suma. Con la deducción del pago de colegiaturas ganan los estudiantes, ganan los padres de familia y gana México.

Señoras y señores:

La medida que hoy anuncio representa una inversión en educación, representa un apoyo a las familias mexicanas y un paso hacia el bienestar para el país, con lo cual, el Gobierno de la República participa, junto con los padres de familia, en una manera idónea para propiciar el mejor crecimiento de nuestros niños y jóvenes, y asegurarles un mejor futuro, a través de la educación de calidad.

Con ella, fortalecemos la importante labor que estamos realizando en materia educativa, ya que en nuestro país el sistema privado complementa favorablemente la educación pública, que es y seguirá siendo el centro del Sistema Educativo Nacional.

El Gobierno Federal refrenda así su compromiso con la educación de nuestros niños y jóvenes, y con la economía familiar.

Medidas como las que hoy se anuncian, representan pasos claros en la construcción de un México más fuerte, un México con jóvenes mejor preparados para competir y triunfar en un mundo que compite intensamente.

Muchas gracias.